¿Sabías que existe una convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres?
Queremos contarte que si
existe una convención que tiende a preocuparse por el bienestar de la fauna y
la flora. Esta convención fue Firmada en Washington, el 3 de marzo de 1973.
Dicha convención fue planteada a partir de una problemática, la cual es la falta
de reconocimiento del valor de la fauna y flora silvestres y la excesiva
explotación mediante el comercio internacional, lo que conlleva a la
exportación y a la extinción de especies; a esta convención se acogieron países
como: Venezuela, Uruguay, Trinidad y Tobago, Perú, Paraguay, Panamá, Nicaragua,
México, Jamaica, Guyana y Colombia.
Las estrategias de esta
convención se basan en reducir las amenazas que se han venido presentado
durante muchos años en cuanto a la fauna y flora, evitando la extinción de
especies amenazadas, reconociendo el comercio ilegal y por ende su exportación;
incluye estrategias como sanciones, medidas, procesos legales y judiciales. En
el siguiente vídeo encontrarás una pequeña explicación del CITES
Se puede evidenciar la
normatividad y no se cumple a cabalidad, puesto que se continúa viendo que
existe exportación, reexportación y comercio sin las medidas adecuadas (sin
seguir un debido proceso); a diario se escuchan noticias frente al comercio o
la extinción de especies y consideramos que el hombre tiene gran
responsabilidad en ello, puesto que al comprar fauna o flora silvestre esta ya
no puede seguir reproduciéndose, cambia su habitad y se puede ver afectada su
existencia; como éste se observan innumerables ejemplos, podemos hablar de los
zoológicos que aunque estos establecimientos
“cumplen con ciertos reglamentos” no se piensa como tal en los animales, pues
este tipo de fauna es salvaje y su casa no está en la ciudad, su habitad es
diferente, aparte no tiene la libertad de convivir con otros de su especies y
reproducirse. En el caso de las plantas, es importante pensar en el clima y las
condiciones en las que debe habitar y que en ocasiones no es relevante para su
explotación y simplemente, se realiza.
A modo de cierre podemos decir
que esta convención lleva al cuestionamiento y a la reflexión, ¿Cuántas especies
se han extinto hasta el día de hoy por culpa nuestra? Son demasiadas especies
que han desaparecido, o por la misma comercialización solo queda en el mundo
una hembra o un macho de una especie y ya no puede reproducirse; son muchos los
animales a los que se les ha arrebatado su habitad, su casa, su manada. Los
humanos todo el tiempo están evadiendo normas, cometen actos por antojo o
simplemente porque cree que tiene “poder” el humano no razona, no piensa en el
daño que causa a la flora y a la fauna, al comercializarla o al comprarla de
forma ilegal, no solo la desintegra de los suyos también la obliga a vivir en
un habitad que no le pertenece y al mismo tiempo extingue una especie.
La invitación es ver el
siguiente video y pensar… ¿Qué hemos hecho por ellos?
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